La deuda pública alcanzó los 63.019 millones de dólares estadounidenses hasta julio de 2021, el semejante al 61,52% del PIB, según el Ministerio de Hacienda.
La iniciativa de reforma tributaria está en la arena pública, y no en balde, por su fuerte encontronazo tanto en los campos productivos como en los impositores. En el contexto de la referida reforma tributaria, se relata la oportunidad de aprobar una Ley de Compromiso Fiscal, la que formaría una parte de un convenio que aborde tanto los puntos relativos a los capital (impuestos) como al gasto público.
Es evidente la necesidad de un convenio para hacer una reforma fiscal balanceada que contribuya al avance de la República Dominicana, la que no ha de estar pensada solo a aumentar los capital, sino más bien a fomentar las bases para la continuidad económica. desarrollo del país. Es en este contexto que nació la iniciativa de una ley de compromiso tributaria, para garantizar que los capital que recibe el estado sean adecuadamente canalizados a objetivos lícitos.
El límite se alcanzó frecuentemente
El límite de endeudamiento se fijó a inicios del siglo XX, para eludir que el Departamento del Tesoro tuviese que soliciar permiso al Congreso toda vez que tuviese necesidad de producir Bonos para cambiar cuentas.
Esta no es la primera oportunidad que se llega a este punto. Según la BBC, desde 1960 hubo intentos de acrecentar, agrandar o comprobar la definición del límite de deuda 78 ocasiones.
Los últimos tres sucedieron en los últimos seis meses.
¿Cuál es el límite máximo de endeudamiento?
El «techo de la deuda» es precisamente lo que semeja: el máximo que el gobierno federal puede soliciar prestado. ¿Por qué razón hay un máximo? Por el hecho de que el Congreso estableció uno hace algo más de un siglo para achicar la deuda del gobierno. Pero en vez de sostenerlo, el Congreso prosiguió adelante y elevó el límite toda vez que se alcanzaba.
Los razonamientos a favor son normalmente siempre y en todo momento exactamente los mismos. Una es que el dinero ahora se ha gastado: acrecentar el límite de la deuda solo nos deja continuar pagando a nuestros acreedores. (Mucho más sobre eso en un segundo). Otra es que si no se eleva el máximo, EE. UU. incumpliría ciertas de sus obligaciones, lo que desencadenaría una crisis en el sistema de finanzas.